Felicidades Papa

miércoles


Nunca me llevo a pescar. Era su afición. Se levantaba la madrugada de los domingos y se iba al club de pesca, y el primero que le ofreciera sitio en la barca, allí que se subía. Le esperaba horas de pesca. Caballas, Mojarras y Bailas era su botín. El salón de casa estaba adornado por copas y trofeos. Era bueno en eso, pero nunca me enseño a pescar. “Tu no aguantarías tantas horas en el barco, eres demasiado delicado y te mareas...". Su manera de protegerme era esa. No tenía estudios, desde pequeño trabajando para llevar dinero a casa, una historia que por oída en tantos hogares parece mentira, pero tampoco era inusual en aquellos tiempos. Trabajar y trabajar y en sus ratos libres, ingeniárselas para ganar algo de dinero.
Una vez al año, mi padre iba a visitar a su tía abuela , era el día en que nos llevaba a los 3 hermanos , por aquel entonces aun no habían nacido mis dos hermanas pequeñas, y siempre terminábamos en la plaza de España, dando de comer a las palomas , mientras tomábamos un helado. DIA mágico y único.
Mi padre fue criado en esa creencia de que el Hombre no tiene que mostrar sentimientos. El, a su manera, pensaba que el cumplía perfectamente trayendo dinero a casa y que no faltara la comida. Eso le convertía en Rey de la Casa y pobre de aquel que osara perturbar su siesta, la sagrada siesta.
Sus tres últimos años sirvieron para conocer a esa persona que estaba tras su mascara. Un ser desvalido, pobre y triste. No comprendía que había echo mal y se martirizaba constantemente por todo. Fue un Master de conocimiento, un curso acelerado de paciencia y dolor. Nadie tiene culpa por hacer lo único que le enseñaron.
Papa, hoy hace un buen día, ¿quieres venir a pescar conmigo?

1 Cosas que quiero decirte.:

embrujo dijo...

quieres que te haga padre??? yo tengo la receta perfecta pero no se si saldra bien..... besitos